Muchas personas en España han implementado como una solución para mantener alejados a los okupas de sus viviendas, colocar en sus viviendas las puertas antiokupas, las cuales se colocan sobre la puerta de su vivienda principal, para ofrecer una protección adicional mientras no se encuentre nadie en la vivienda.
Es probable que, en España, una vivienda pueda recibir la visita de personas indeseadas cuando no exista ningún propietario en casa, ya que los llamados ‘okupas’ no vacilarán en ocupar casas que se encuentren por mucho tiempo deshabitadas y tomar posesión de bienes que no les pertenecen.
En los últimos años, la ocupación ilegal se ha extendido como la pólvora en España. A este fenómeno contribuyó el alza indiscriminada de los precios inmobiliarios y la lenta aplicación de la legislación española frente a estos enemigos de la propiedad privada.
Sumado a lo anterior, la crisis económica y la pandemia han agravado esta situación, debido a que muchas viviendas han quedado desocupadas ya sea por desalojos previos a la pandemia, la excesiva construcción inmobiliaria, o por la misma crisis generada por las medidas de no movilización por el Covid 19, lo que ha dado paso al fenómeno de las puertas antiokupas.
¿Son efectivas las puertas antiokupas?
En opinión de muchos expertos, las puertas antiokupas son efectivas, pero son puertas que pueden utilizarse de manera provisional, mientras la vivienda esta desocupada, pero no es una solución permanente, ya que no pueden dejarse cuando hay personas viviendo dentro de la vivienda y cuando estas son retiradas se mantiene el mismo problema que ameritó su instalación.
La idea de las puertas antiokupas surge en primera instancia de un grupo de cerrajeros que vieron que la ocupación ilegal de viviendas se venía incrementando rápidamente en España y decidieron buscar una solución que ayudara a los propietarios a protegerse, de los que ellos llamaron ‘okupas’.
Los ‘okupas’ son grupos organizados por mafias, que colocan sus propias reglas, son quienes administran la ocupación de estas viviendas y hasta cobran arrendamiento a quienes la ocupan de manera ilegal, convirtiéndose en verdaderos problemas para sus reales propietarios al tratar de desalojarlos por medio de la ley.
Las puertas antiokupas no pueden quedarse de manera permanente en una vivienda, ya que los que son sus bondades para cuando la vivienda está desocupada, se convierte en un problema cuando sus propietarios se encuentran dentro de ella.
Las puertas antiokupas se abren hacia afuera, no tienen pomo ni tampoco mirilla y ese el motivo por el cual no se pueden tener colocadas cuando sus dueños se encuentran viviendo dentro del hogar.
¿Es rentable colocar una puerta antiokupas?
Una puerta anti ocupa tiene un costo promedio de 1000 EUR, que incluye los gastos de instalación. Si se compara con los 40.000 EUR que puede llegar a costar pedir la desocupación de una vivienda en España, el costo suele ser realmente económico, sin tomar en cuenta el tiempo que se puede invertir en desocupar la casa y todos los inconvenientes que ocasiona una ocupación ilegal.