Las técnicas que los ladrones han utilizado para ingresar a las casas les han dado éxito. El ganzuado, implementado durante mucho tiempo, y el bumping, cuyo éxito consiste en no dejar rastro, son un verdadero problema al momento de preservar nuestras pertenencias.
Si nos fijamos bien, en ambas técnicas, los ladrones se valen de herramientas que intervienen las cerraduras de las puertas. Pero, ¿y si existiese una opción en la que la puerta se mantuviese cerrada y bajo total cuidado?
Esta nueva alternativa para la seguridad tiene nombre: cerraduras invisibles. Como cerrajeros profesionales tenemos experiencia con ellas. ¿Deseas saber de qué se trata? Acá te contamos.
¿En qué consisten las cerraduras invisibles?
Las cerraduras invisibles, como su nombre lo indica, son cerrojos de alta seguridad que no están a la vista de todos. Se ocultan en la parte interna o detrás de puertas o ventanas, para que no sean forzadas. Funcionan de manera digital, por lo que forman parte del grupo de cerraduras electrónicas.
Actualmente son uno de los modelos más implementados, gracias a su facilidad de instalación y lo discretas que resultan. Además, para que puedan activarse, las cerraduras invisibles necesitan de un mando que funciona a distancia. En la mayoría de los casos, este puede implementarse en un llavero, con un diseño parecido a los controles de alarmas de vehículos. Sin embargo, también existe la opción de configurarse mediante un teléfono con Bluetooth.
Por lo general, el mando cuenta con una serie de códigos que se actualizan cada cierto tiempo. Así se evita que los ladrones puedan hackearlo.
Como toda cerradura electrónica, las invisibles funcionan con baterías que tienen duración de varios meses. Algunas pueden llegar hasta un año. Su secreto está en un sistema que utiliza la energía de manera adecuada, solo cuando sea necesaria.
Ventajas de las cerraduras invisibles
Al funcionar de manera electrónica, las cerraduras invisibles ofrecen beneficios increíbles. Su uso se ha hecho común por parte de todo tipo de personas. En una época en la que el bumping es la causa de muchos robos, estos cerrojos son una solución. Algunas ventajas incluyen:
- Facilidad de instalación en todo tipo de puertas.
- Control remoto mediante un mando que puede diseñarse de manera discreta.
- Al estar escondidas, los ladrones no podrán tener contacto con ellas y forzarlas.
- Pueden activarse cuando se desee o de manera automática.
- La actualización de códigos evita que sean hackeadas.
- Permiten la combinación con cerraduras convencionales, lo que aumenta la seguridad.
¿Vale la pena adquirir una cerradura invisible?
Si está buscando una alternativa para evitar que los ladrones utilicen técnicas como el bumping o el ganzuado, entonces la cerradura invisible debe ser su elección. Como mecanismo de seguridad, ofrece muchos beneficios para contrarrestarlas.
En general, es una cerradura muy fácil de instalar que puede implementarse como ayuda adicional en otros sistemas: puertas blindadas, acorazadas, etc. De esta forma se disminuye el riesgo de ser víctima de robos.
Asimismo, su uso es regulable. Puede elegir implementarse en los momentos en que se considere oportuno, como viajes, salida de fin de semana o al ir al trabajo.
Instalación de cerraduras invisibles en Barcelona
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